alt1º FESTEJO DE ABONO. Domingo 16 de abril de 2006. 

El sevillano Manuel Jesús ‘El Cid’ ha sido el único que ha conseguido dar una vuelta al ruedo en el festejo que ha inaugurado la temporada sevillana en 2006. Sus compañeros de cartel, Morante de la Puebla y César Rincón, se fueron de vacío.

 

CRÓNICA:

El Cid fue quien más cerca estuvo del triunfo en la corrida que inauguró la temporada sevillana. Su faena al sexto toro tuvo vibración hasta que el animal, el más colaborador de la corrida de Cuvillo, se desinfló en la fase final de la faena. Las series ligadas y el espadazo fulminante del torero de Salteras le colocaron cerca de la primera oreja de la temporada, pero se tuvo que conformar con la vuelta al ruedo.En su primer toro , El Cid no pudo destacar por tener delante un animal de incierto comportamiento.

Cinco toros de Nuñez del Cuvillo (el primero como sobrero) bien presentados y serios y de escaso juego a excepción del sexto, que se dejó más.El quinto fue un sobrero de Pereda que fue a menos.

César Rincón, silencio y silencio tras aviso.

Morante de la Puebla, palmas y ovación.

Manuel Jesús ‘El Cid’, silencio y vuelta al ruedo.

Lleno

Alcalareño saludó montera en mano tras banderillear al sexto.

Morante mostrós voluntad ante el primero de su lote, un animal que tenía media arrancada y se movía con sosería.Por la condición del toro no acabó de romper la faena.Pero el de La Puebla volvió a intentarlo en el quinto , un sobrero de Pereda que sustituyó al toro titular , que se partió un pitón al rematar en un burladero.Morante ahornó la embestida del sustituto en el arranque de la faena y le dio algunos muletazos en redondo de buen trazo, pero el animal bajó de tono y dejó la miel en los labios.

Tampoco César RIncón , que encabezaba el cartel, tuvo especial fortuna con su lote.El primero de la trade fue devuelto por débil y el sobrero fue un manos de embestida huidiza e imposible.El cuarto le gustó más y lo brindó , pero el animal le falto la entrega necesaria y la faena no puedo remontar el vuelo.

Al final , la gente se quedó con el buen sabor de boca de El Cid en el sexto y los intentos y detalles de Morante en el sobrero de Pereda.

 

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