19º FESTEJO DE ABONO. Domingo 13 de abril de 2008.
El salmantino Javier Valverde ha cortado una oreja en la corrida de Miura después de ganarse el respeto de la plaza gracias a la firmeza que demostró en el primero de su lote. El Fundi y Juan José Padilla no pudieron conseguir trofeos, pero fueron ovacionados por sus respectivos esfuerzos.
CRÓNICA:
El Fundi consiguió buenos lances por el pitón izquierdo en el toro que abrió plaza. Este ‘miura’ parecía templado en los primeros tercios. Compartieron banderillas Fundi y Padilla en un tercio brillante y Fundi brindó la faena de muleta al público. El toro de Miura pareció cambiar y embistió con todo a la muleta, pegando un tornillazo que descompuso los intentos del diestro madrileño. Por el pitón izquierdo fue peor, desarrollando peligro, pero Fundi plantó cara y fue superior al enemigo. Le costó matar porque el toro no le dejaba pasar y sonaron dos avisos.
Se lidiaron cinco toros de Miura -el segundo sobrero del mismo hierro- bien presentados y de escaso y complicado juego. El cuarto fue un sobrero del Conde de la Maza, complicado.
El Fundi, ovación tras dos avisos y silencio.
Juan José Padilla, saludos y saludos.
Javier Valverde, oreja y silencio.
La plaza registró lleno de ‘no hay billetes’.
El segundo de su lote fue devuelto por débil a los corrales y en su lugar salió un sobrero del Conde de la Maza tan serio como complicado. Tanto es así que no lo banderilleó. Difícil papeleta para El Fundi ante un toro que se revolvía con violencia o sencillamente buscaba al torero. Sólo pudo estar en profesional, sin volver la cara, pero sin poder conectar con la gente por falta de enemigo.
Juan José Padilla se las vio en primer lugar con un sobrero de Miura de 680 kilos. En banderillas destacó el tercer par, de dentro a fuera y con la muleta toreó primero en línea recta a un toro que iba, pero siempre a su aire, sin humillar. Padilla le cogió el aire en un par de series hasta que el animal se rajó. Estuvo por encima el jerezano, que mató de estocada y saludó desde el tercio.
Lo propio hizo en el quinto, un ‘miura’ justo de fuerza que no tuvo más de media arrancada y que además fue a menos. Todos los intentos del torero fueron en vano, pero la gente supo apreciar su esfuerzo. Mató de estocada y descabello y otra vez salió al tercio a saludar.
Javier Valverde se mostró muy firme ante el tercero de la tarde, un toro de Miura limitado de fuerza y con complicaciones. El animal se acostaba por el pitón derecho, pero Valverse estuvo valiente e insistió por ese lado hasta que cuajó una buena serie que hasta hizo sonar la música. El resto de la labor fue una pelea, menos cuando cogió la izquierda y dejó algún natural de buen trazo. Se le fue la mano en la estocada y el acero quedó bajo, pese a lo cual el público pidió una oreja que el presidente acabó por conceder.
En el sexto lo tuvo más difícil el torero salmantino. El toro se quedaba muy corto ya de salida, esperó en banderillas y se frenó en la muleta. No quería embestir el de Miura y el público obligó a Valverde a ser breve ante la falta de posibilidades que se adivinaban a la faena.
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