alt
 
22º FESTEJO DE ABONO. Domingo 16 de mayo de 2010. 

La terna de novilleros que participó en el festejo de esta tarde se fue de vacío. Tan solo el francés Thomas Joubert fue capaz de cosechar una ovación en la plaza de la Real Maestranza de Sevilla. El escaso juego de los novillos de Javier Molina fue condicionante de tan poco contenido en lo artístico.

 

CRÓNICA:

Thomas Joubert dibujó buenos lances por el piton izquierdo al primero de la tarde. El novillo embistio bien en el comienzo de faena y el francés ligó con temple y compostura dos tandas de derechazos. A partir de ahí el novillo se rajó pero Joubert se empleó en exprimir todo lo que el astado permitía. Mató de estocada y descabello y Joubert salió a saludar desde el tercio.

Se lidiaron novillos de D. Javier Molina, bien presentados y de escaso juego.

Thomas Joubert, ovación y silencio.

Miguel de Pablo, silencio y silencio.

Juan Cervera, silencio y silencio.

Más de media plaza.

Se guardó un minuto de silencio por la muerte de José Gómez Ortega ‘Gallito’.

Miguel de Pablo pasó apuros con el capote en el segundo, que presentó complicaciones de salida. Las mantuvo en la muleta, manseando y buscando al hombre cada vez que podía. Fue un animal deslucido contra el que chocaron todos los intentos de De Pablo, que estuvo muy dispuesto y por encima. Mató de tres pinchazos y estocada.

El tercero dio una tremenda colada a Juan Cervera en el capote. Una vez picado se movió en la muleta y Cervera mostró su buen corte en el comienzo y en algunas fases de la faena, sobre todo cuando fue capaz de superar el molesto cabeceo del novillo a base de bajarle la mano. Mató de estocada y su labor fue silenciada.

El cuarto manseó de salida y buscó chiqueros en banderillas. Para colmo dio una voltereta en el comienzo de faena que lo limitó más, haciendo que se parara pronto. Joubert dejó la muleta puesta por ambos pitones, pero tuvo poca respuesta de un novillo demasiado aplomado y soso. Estocada que asoma y estocada sin puntilla.

De Pablo recibió al quinto con una larga cambiada y luego intercaló chicuelinas a un novillo que se volvía al revés. Brindó al público y a la primera de cambio el novillo buscó chiqueros. Por mucho que intentó recoger su embestida, el animal siempre se fue suelto buscando su querencia, lo que deslució la labor del novillero que de nuevo puso mucha voluntad. Mató de estocada.

El sexto fue seriamente castigado en el caballo, de modo que llegó muy parado a la muleta. Juan Cervera le plantó cara por la izquierda y se encontró con una embestida casi inexistente. Por el pitón derecho también se quedó muy corto. Novillo inservible, por tanto, en el cierre de la tarde. Mató de media y cuatro descabellos.

{gallery}galeria/temp2010/16may:180:120:0:0{/gallery}

Deje un comentario